¿Por
qué la x?
Los árabes llamaban a la incógnita "shay"
(cosa). La primera traducción fue hecha al latín
en España (Roberto de Chester, Toledo, 1145), y como la
palabra árabe la cosa suena algo parecido a la x medieval
la llamaron x y ahí sigue. En Italia se tradujo como "cosa",
abreviándola como co y a los que resolvían ecuaciones
se les llamaba cosistas. |